Seguramente, en alguna ocasión hemos sentido esa sensación tan peligrosa de cabecear mientras conducimos. Hemos podido pensar que sería pasajero y que lograríamos vencer ese incipiente estado de somnolencia y como mucho, nos movemos en el asiento y nos desperezamos un poco.
Pocas veces nos tomamos en serio esas señales y nos centramos en tomar alguna decisión para solucionar este problema, como por ejemplo descansar o incluso dormir en un espacio adecuado -área de descanso, estación de servicio, etc-. Ahí es cuando surge el verdadero problema: un 55% de los conductores españoles declaran seguir conduciendo a pesar de sufrir esos síntomas.
Muchos conductores piensan que si no tienen sueño antes de entrar en el vehículo no tendrán problemas de somnolencia al conducir, pero se ha demostrado que solamente con el hecho de ponerse al volante aparecerá el sueño, independiente del grado de cansancio y del estado físico y mental en el que uno se encuentre. Eso obviamente, afecta a la concentración y reduce la capacidad de reacción cuando aparecen estos niveles de alerta. Una de las razones es que la vibración del vehículo se transmite al conductor con una sensación de adormecimiento y sueño, de la misma forma que cuando se acuna a un niño pequeño.
Según un informe elaborado por La Fundación Española para la Seguridad Vial (FESVIAL) con datos de la DGT señala que el sueño y la fatiga fueron la principal causa de 2 722 accidentes de tráfico ocurridos en 2017 en los que murieron 177 personas con 4 063 heridos de los cuales 589 fueron de pronóstico grave.
La del sueño y fatiga es una de las pocas situaciones donde la responsabilidad está en el propio conductor, por lo que hay pocas maneras de solucionarlo de una manera externa. Hasta ahora, porque la tecnología ha dado un paso adelante que permite controlar más o menos estas situaciones peligrosas de somnolencia y la consiguiente pérdida de control del coche.
Entre ellas, cabe destacar la que ha desarrollado Panasonic: un sistema que se compone de una cámara, un sensor infrarrojo y otro sensor para medir la temperatura dentro del coche.
Los sensores detectan cual es la sensación térmica del conductor y la del habitáculo. El calor aumenta la sensación de somnolencia. Así que, como primera medida, se puede enfriar la temperatura del coche para cortar esa modorra.
Si esto no funciona y la modorra se va transformando en esos síntomas evidentes del sueño -pestañeos, bostezos, etc.- entra en funcionamiento la cámara que detecta todas esas expresiones faciales que denotan cansancio.
El sistema lanza alarmas sonoras y visuales para que el conductor se de cuenta de que necesita descansar y pare el coche.
Para los que quieran saber más de este sistema de Panasonic, que tiene más de 20 patentes en su desarrollo, recomendamos leer este artículo. Lo explica con detenimiento para entender en profundidad como actúa.
Para combatir la somnolencia las recomendaciones son claras. En este artículo de nuestro blog las señalamos una a una y te invitamos a leerlas porque nunca está de más recordarlas para tener más seguridad cuando conducimos.
Fuentes consultadas: elcomercio.es (el sueño causa muertos), diariodetrasnporte.com (dispositivo de Panasonic contra el sueño) y mmtseguros.es (como evitar el sueño al volante).