Las ciudades hacen grandes esfuerzos para reducir los atropellos en su vías, pero el mayor logro lo conseguirá la tecnología AEB que ya incorporan algunos vehículos.
Según datos de la DGT más de 11.000 atropellos se producen cada año, de ellos alrededor del 90%, casi la totalidad, en ciudad y el resto, en carreteras.
Los atropellos en ciudad son mas numerosos, pero en proporción originan menos muertes: el 60% de los casi 400 fallecido por atropello lo fueron en ciudad, el resto en carretera. La explicación es bien sencilla: en ciudad los coches van a menos velocidad y por lo tanto, el impacto es menor y menos violento que cuando sucede en carretera.
Según los datos de la DGT mas del 30% de los atropellos se deben a imprudencias del peatón, como es cruzar de una manera sorpresiva la vía, no respetar el semáforo, no utilizar los pasos de peatones, entre otras.
Más de 11.000 atropellos se producen cada año, de ellos alrededor del 90%, casi la totalidad, en ciudad y el resto, en carreteras.
Las personas mayores y los menores de 14 años son los dos segmentos de población más expuestos a estos accidentes. Debemos hacer la observación que la probabilidad de morir en caso de atropello se multiplica por cuatro en caso de que la víctima sea mayor de 65 años.
LAS SOLUCIONES DE LAS CIUDADES
En Londres, por su norma de circular por la izquierda, tenían muchos problemas con los atropellos de turistas. Tomaron la determinación de pintar en los pasos de peatones “Look right” o “look left” ilustrado con una flecha indicadora. Así, por mucho que un turista estuviera acostumbrado a mirar a la izquierda, la flecha le indicaba el sentido de a donde mirar.
Ahora este tema está en candelero debido al auge de los móviles. Mucha gente va caminando por la calle con el móvil en la mano y se originan despistes de muy variado calado, siendo el de atravesar la calle sin mirar uno de ellos y la con el consiguiente situación de riesgo. Se calcula que más de un 20% de los atropellos se deben a que el peatón va mirando el móvil y se despista.
Una solución es la que emplean dos ciudades alemanas que ponen en el suelo luces led que cambian de color -rojo o verde- dependiendo de si el semáforo está en rojo o no.
Se calcula que más de un 20% de los atropellos se deben a que el peatón va mirando el móvil y se despista.
También es interesante conocer la solución que han aplicado en el ayuntamiento de Cambrils, Tarragona. La mayoría de los atropellos se suceden por las noches. La solución dada es que cada vez que se acerca un peatón cuando ya no hay mucha luz, los sensores de presión situados en la zona del paso de cebra, detectan cuando alguien quiere cruzar. Inmediatamente el sistema entra en funcionamiento e iluminan las bombillas led con bastante potencia –situadas a lo largo del paso cebra-, además de encender también las señales verticales que están los laterales de la calzada. Estas dos alertas visuales que recibe el conductor le obliga a detenerse. La iluminación dura mientras el peatón cruza y luego vuelve a apagarse.
Fuente: Ayuntamiento de Cambrils
Aunque este sistema se ha implantado en el ayuntamiento de Cambrils y algún otro de la Comunidad andaluza, sus creadores lo ven muy interesante para otras comunidades cuyas condiciones meteorológicas reducen la visibilidad debido a la niebla, lluvia, etc., condiciones en que sí se activa este sistema. Puedes ver aquí como fuenciona este sistema.
Existen además otros sistemas menos avanzados, pero con la misma intención de frenar este número de atropellos en ciudades. Entre otros, podemos señalar: los pivotes en las zonas donde están los semáforos que se iluminan en rojo y verde según se pueda pasar o no; los pasos elevados que obligan a reducir la velocidad; bandas rugosas en forma de cuadrado elevado; o los simples focos que iluminan con potencia los pasos de peatones y, en la oscuridad de las noche, resaltan para llamar la atención.
LAS SOLUCIONES DE LA TECNOLOGÍA
Pero desde aquí pensamos que la verdadera revolución vendrá con la aplicación de la tecnología que se está desarrollando para los coches autónomos.
Cuando se instalaron en los vehículos los sensores para hacer más fácil el aparcamiento de vehículos, nos dimos cuenta que sería cuestión de poco tiempo que apareciera algún sistema que en vez de detectar obstáculos para aparcar, detectaran personas y de esta manera evitar atropellos.
Fuente: Volvo
Pues bien, varios fabricantes como Ford, Mercedes, Toyota, Volkswagen, etc., ya han desarrollado lo que se conoce como el frenado autónomo de emergencia o AEB (Autonomous Emergency Braking en inglés) que sirve para evitar la inminente colisión con otros coches, personas, obstáculos, o cualquier otro peligro, respondiendo mediante la aplicación de los frenos para detener el vehículo sin intervención del conductor. Dependiendo del fabricante puede disponer de sensores, radar, vídeo, tecnologías de infrarrojos, ultrasonidos o de otra índole.
La verdadera revolución vendrá con la aplicación de la tecnología que se está desarrollando para los coches autónomos
A modo de ejemplo, queremos mostrar lo desarrollado por Volvo. De todos es sabido que siempre ha tenido una sensibilidad especial para que sus coches fueran más seguros. Además de inventar el cinturón de seguridad de tres anclajes en 1959, fue de los primeros en incorporar el sistema de deformación de la chapa del capó delantero para que, en caso de producirse una colisión con una persona, el impacto se amortiguara o disminuyera, para que las consecuencia al peatón fueran menores.
Actualmente, todos los vehículos de Volvo llevan de serie el sistema City Safety. Este sistema identifica la posibilidad de riesgos en la vía como vehículos, peatones y ciclistas tanto en condiciones de iluminación optimas como en las más extremas de nocturnidad.
El sistema se basa en un radar que está instalado en el parachoques, lo que le permite detectar objetos; y una cámara que se instala en el parabrisas y que indica si el objeto que se acaba de detectar es una persona.
Cuando se detecta un peatón se lanza un aviso sonoro y visual que irá aumentando en intensidad a medida que se vaya aproximando
Cuando se detecta un peatón se lanza un aviso sonoro y visual que irá aumentando en intensidad a medida que se vaya aproximando. Así, el conductor podrá frenar con la debida antelación. ¿Pero qué pasa si el conductor, por las razones que sean, no para?. El propio coche frenará automáticamente evitando el atropello.
La velocidad idónea para que este sistema sea totalmente efectivo son los 35 km/h, una velocidad que en ciudad sería la deseable. En caso de que el coche fuese más rápido, aunque el coche no se detuviera, el impacto sería mucho menos peligroso para el peatón.
Fuente: Volvo
De todas maneras, se está estudiando ampliar esos 35 km/h hasta los 60 km/h. En Estados Unidos quieren hacerlo obligatorio en todos los coches nuevos a partir del año 2020, y creemos que en la Comunidad Europea también lo será, pero aunque no sea obligatorio, los que piensen comprar un coche tendrán este sistema como una de sus prioridades. Por eso será una autentica revolución en la lucha para combatir los atropellos.
Este video de la 7 motor nos ilustra bastante bien de todo lo referente a este tema.
Y para ver los sistmas de AEB de diferentes fabricantes, aquí dejamos los enlaces de video:
TOYOTA
FORD
MERCEDES
WOLKSWAGEN