Aunque comúnmente el color no es el principal criterio al seleccionar un automóvil, puede ser un factor decisivo para descartar su compra si no estamos totalmente a gusto con él.
A muchos les da igual el color de su coche; se fijan en otras características que son más importantes: potencia, precio, línea, seguridad, etc. Sin embargo, la elección del color de un coche, aunque a simple vista pueda parecer una mera cuestión estética, encierra, en realidad, todo un proceso de decisiones y elecciones tanto racionales como irracionales, con una importante complejidad significativa. Esta decisión no solo abarca aspectos psicológicos que reflejan la personalidad y las preferencias del comprador, sino que también considera factores legales y de seguridad. Entender esto en su totalidad nos ofrece una perspectiva más rica y profunda sobre la importancia y el impacto de la elección del color en la compra del coche.
Influencia del color en la personalidad del conductor
La elección del color del coche es un reflejo de la personalidad del propietario. Estudios psicológicos sugieren que los colores vivos, como el rojo o el amarillo, suelen ser elegidos por individuos extrovertidos y dinámicos, mientras que colores como el negro o el azul oscuro son preferidos por personas que buscan proyectar una imagen de sofisticación y autoridad. El blanco, que es uno de los colores más populares mundialmente, se asocia a menudo con la pureza y la simplicidad.
Consideraciones de seguridad relacionadas con el color
El color del vehículo también influye en su visibilidad y, por tanto, en la seguridad. Los colores brillantes como el blanco, amarillo o naranja son más visibles en condiciones de poca luz o durante la noche, lo que podría reducir el riesgo de accidentes. Por el contrario, colores oscuros como el negro, azul marino o verde oscuro pueden ser menos detectables, especialmente en condiciones de baja iluminación.
- Un estudio de la Universidad de Monash en Australia encontró que los vehículos de color blanco son generalmente los más seguros, mientras que los colores oscuros presentan un mayor riesgo de accidentes.
- Otro estudio afirma que el 60% de los coches rojos han sufrido accidentes de tráfico, seguido del marrón (59%), el negro (57%), amarillo (55%), azul (54%), blanco (50%) y gris (40%). Entre un 35 % y un 45 % de los coches nuevos fabricados en todo el mundo son de color blanco. Una de las razones, además de la seguridad, es por ser el preferido por flotas de vehículos comerciales por su neutralidad y la facilidad para colocar logotipos de las empresas.
Impacto económico del color del coche
Desde el punto de vista económico, el color del coche puede afectar tanto a su precio inicial como a su valor de reventa. Colores neutros como el negro, blanco y gris suelen tener mejor valor de reventa debido a que son colores que siguen gustando, aunque pase el tiempo. Lo contrario que pasa con colores más extravagantes o menos comunes, que pueden depreciarse más rápidamente debido a la menor demanda en el mercado de segunda mano. Además, el color del coche puede ahorrar combustible. El blanco rechaza más la luz solar con lo que dentro del coche hace menos calor y se evita en cierta medida el uso del aire acondicionado, lo que permite el ahorro de gasolina.
Legislación europea y restricciones de color
En el contexto legal de la Unión Europea no se prohíbe específicamente colores de coches basándose en criterios estéticos; sin embargo, hay regulaciones que prohíben ciertas sustancias tóxicas en las pinturas de coches. Estas regulaciones están destinadas a limitar el uso de metales pesados y compuestos orgánicos volátiles (COV) que pueden ser perjudiciales tanto para el medio ambiente como para la salud humana.
Los fabricantes de automóviles deben cumplir con estas normativas, lo que puede influir en la disponibilidad de algunos colores o tipos de pintura. No se pueden pintar los coches de color purpurina ni tampoco los cromados, aunque los fabricantes ya están en proceso de encontrar métodos sustitutivos de fabricación para poder seguir fabricando los cromados que, en determinados estratos de población, tienen muchos seguidores.
¿Es cierto que el color del coche influye en el precio del seguro?
Rotundamente no, es una leyenda urbana que tienen muchos seguidores, pero ninguna compañía de seguros sube la tarifa dependiendo del color. Un buen seguro te ofrecerá unas buenas coberturas y un servicio de acuerdo con tus necesidades, y únicamente te preguntará el color del coche como un elemento identificativo. De todas maneras, aunque el color no sube la tarifa del seguro, el acabado sí puede hacerlo: la pintura metalizada debes hacerla constar al contratar tu seguro y eso sí que puede subir un poco la tarifa.
¿Te pueden multar si cambias el color del coche?
Sí. Como decíamos arriba el color del coche es un elemento identificativo y la DGT pone en el permiso de circulación esa identificación. Si cambias el color, lo debes comunicar a la DGT y así no tendrás problemas si te para la Guardia civil o si vas a la ITV.
En definitiva, el color del coche no es una prioridad decisiva a la hora de elegir un coche. La seguridad sí que debería ser un criterio.
Fuentes consultadas.
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