La hipertensión, comúnmente conocida como presión arterial alta, es una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo. A menudo se la denomina "la asesina silenciosa", ya que es una de las causas principales de muertes prematuras en el mundo. Esto es debido a su naturaleza maligna y a la falta de síntomas evidentes en las primeras etapas, ya que se pueden confundir con otro tipo de dolencias. Alguno de estos síntomas, por ejemplo, son las cefaleas matutinas, hemorragias nasales, ritmo cardíaco irregular, etc., que pueden atribuirse a otras causas.

Tener la tensión alta significa que la sangre hace demasiada presión sobre las paredes de los vasos sanguíneos, lo que puede llevar a enfermedades cardiovasculares, y afecta al 40% de los adultos.

En España, el porcentaje de personas que padecen hipertensión oscila entre el 33% y el 43%, y sabiendo que este aumenta con la edad, en los mayores de 60 años se supera el 60% de personas diagnosticadas. En total, se calcula que en España hay 16 millones de personas con hipertensión.

No todo es derrotismo, porque la hipertensión se puede controlar realizando ciertos cambios en el estilo de vida. 

Las recomendaciones más básicas para prevenir la hipertensión son:

• Una alimentación sana y equilibrada

Debemos seguir una dieta equilibrada rica en frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras y lácteos bajos en grasa. Es conveniente reducir el consumo de sal, alimentos procesados y grasas saturadas.

• Mantener un peso saludable

El sobrepeso aumenta el riesgo de sufrir hipertensión. El índice de masa corporal (IMC) debe situarse dentro de los rangos recomendados. Un IMC saludable oscila entre 18,5 y 24,9. Si supera 25 se está en sobrepeso y superior a 30, obesidad. Aquí puedes calcular tu IMC.

• Realizar alguna actividad física regularmente

Es más importante hacer algo de ejercicio día a día, aunque sea poco, que realizar un ejercicio intenso pero espaciado en el tiempo. Caminar es una actividad que no solo favorece tener una tensión correcta, sino que ofrece muchos beneficios saludables al cuerpo, ya que se recomienda para tener un colesterol adecuado, para bajar peso, para reducir el estrés, etc.

• Reducción del consumo de bebidas alcohólicas y tabaco

El consumo excesivo de alcohol y el tabaquismo son factores de riesgo para la salud en general y, específicamente, para la hipertensión. Limitar el consumo de alcohol y evitar fumar resulta fundamental para controlar la tensión alta.

• Reducir el estrés

El estrés puede favorecer la aparición de la presión arterial alta. El estrés siempre es malo ya que influye negativamente en nuestra energía y actitud. Es fácil pensar que cuando estamos sometidos a una situación estresante, vivimos bajo presión y eso repercute en la tensión.

¿A qué edad se debe revisar la tensión alta?

Es fundamental que las personas nos sometamos a mediciones periódicas de la presión arterial, especialmente a partir de los 18 años, incluso si no presentamos síntomas, ya que la hipertensión a menudo no tiene síntomas evidentes a temprana edad.

Además, se recomienda que las personas con factores de riesgo adicionales, como antecedentes familiares de hipertensión, obesidad, diabetes o enfermedad cardiovascular, se sometan a chequeos regulares para detectar la presión arterial alta y tomar medidas preventivas.

Un primer diagnóstico de la hipertensión se realiza midiendo la presión arterial con un tensiómetro. Casi todas las farmacias poseen uno y si tenemos que medirla más de una vez, la recomendación es acudir directamente al centro de salud.

Bajo ningún concepto nos podemos medicar nosotros mismos. En caso de que el tratamiento del médico de cabecera no de resultado, nos enviará a un cardiólogo que pedirá pruebas complementarias para conocer con la mayor exactitud posible el origen de la hipertensión y recetar el mejor tratamiento para combatirlo.

Es importante tener un buen Seguro de Salud para poder someterse a chequeos regulares para tener controlada la hipertensión, ya que se estima que un 30% de los españoles no son conscientes de tener hipertensión y unos análisis pueden descubrir esta dolencia en fases tempranas, que es cuando resulta mucho más fácil de manejar para no tener problemas.



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