Todo motociclista recuerda con especial cariño su primera moto, ese vehículo que transformó radicalmente su manera de desplazarse y disfrutar del tiempo libre. Adquirir nuestra primera moto puede darse de diversas formas: comprar moto nueva, de segunda mano o incluso recibirla como un regalo. Sin importar el modo, es crucial estar bien informado, pues incluso los regalos pueden tener sus complicaciones.
Los siguientes consejos se aplican tanto para motos nuevas como usadas, y tienen como objetivo que nuestra primera experiencia como propietario de una moto sea segura y satisfactoria.
Primero debemos saber qué tipos de motos nos van. En el siguiente enlace están bien detalladas porque, aparte de las motos de carretera y escúteres, hay más de 15 tipos diferentes de motos. Seguro que alguna cumplirá nuestras expectativas.
El segundo punto se centra en la seguridad. Esto debe ser la máxima prioridad. Para ello debemos elegir la moto que venga equipada con una tecnología avanzada.
Sabemos que disfrutar de la mejor tecnología es caro, pero hay un mínimo que no podemos dejar pasar por alto. Por ejemplo, los frenos ABS han evitado muchas víctimas. Según un estudio, en 2011 se habrían evitado el fallecimiento de 167 personas y 7.215 heridos.
Si nos decidimos por una moto de carretera buscaremos más sistemas ADAS de ayudas a la moto: sistema de control de tracción, etc.
Si nos decidimos por un escúter porque nos van los trayectos urbanos, buscaremos los frenos ABS y con poco más, habremos cumplido, aunque cuanta más tecnología nos podamos permitir por presupuesto, mejor será la elección.
Es fundamental realizar una prueba de conducción, tanto si la moto es nueva como de segunda mano. Esto nos ayudará a sentir cómo se maneja la moto y si se ajusta a nuestras condiciones y estilo de conducción. Hay que fijarse en cómo responde la moto en movimiento: la comodidad del asiento, la facilidad para alcanzar todos los mandos y la fiabilidad al trazar una curva o al frenar.
También es importante manejar la moto en parado, porque dependiendo del peso de la moto y de nuestra altura nos podemos encontrar con problemas de estabilidad en parado. Si el centro de gravedad esta alto, la moto se nos puede ir al suelo y levantarla siempre cuesta bastante.
Si tenemos el carné A2 no puedes llevar una moto de más de 47,2 CV (35 kw), pero podemos comprar una moto más potente y limitarla, para que al cabo de 2 años, cuando obtengas el carné A no tengas que comprarte otra moto.
Los cursos de conducción son altamente recomendables en todos los casos, pero cuando es nuestra primera moto, mucho más. Podremos llevar la moto para que profesionales nos digan cómo dominar la moto y no entrar en situaciones de peligro.
El equipamiento para motoristas a utilizar también resulta fundamental. Lo recomendable es seguir las indicaciones de la DGT que siempre miran por la máxima protección al motorista.
Y, sobre todo, tener un buen Seguro de Moto, que nos proporcione las mejores coberturas con una exquisita relación calidad-precio.
Más información:
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