El 50 % aproximadamente de la basura que producimos diariamente son envases. Nos podemos hacer una idea de las toneladas de residuos que se generan en una ciudad.
De todos es sabido que nosotros, a nivel individual, podemos hacer muchas cosas para evitar dañar el medio ambiente, en casa, de hecho, tenemos ya como rutina, ahorrar agua, electricidad, reciclar, etc.
Debemos mentalizarnos con ese comportamiento medioambiental, y también hacerlo rutinario, es decir, cuando vayamos a comprar un producto, ya sea de poco valor –una botella de leche- o de costo algo más importante –un frasco de perfume Premium-, todos ellos vienen envasados y pocas veces nos paramos en analizar si el envase es ecológico o no.
Numerosas empresas están proponiendo envases a favor del medio ambiente frente a otras que siguen utilizando envases muy contaminantes con el consiguiente impacto ambiental.
Otra manera para contribuir al cuidado de la naturaleza es comprando productos con envases ecológicos.
Últimamente han proliferado los envases ecológicamente sostenible, pero no hay duda de que el mejor envase ecológico es el que no existe. Como decíamos al principio, muchos de los envases que llevamos a casa acaban aumentando la basura que producimos.
Sí, ya sabemos que la tarea no es fácil, pero no por eso se deja de pensar en soluciones.
Según Sara Wolf y Milena Glimbovski, -dos emprendedoras y sumamente concienciadas con el medio ambiente- mucha de la culpa del exceso de residuos la tiene la industria minorista de alimentos, y por ello han abierto el primer supermercado sin residuos con su brillante idea basada en el proyecto “Original-Sin Envasar”.
Tienen solo una marca por producto, –eligen la mejor- y la venden a granel. El cliente va con su tarro de cristal o bolsas de algodón y dosifica su pedido.
Es un nuevo concepto de compra y no sabemos qué saldrá de todo esto, pero es un apuesta de esas que, si salen, será un concepto totalmente revolucionario que nos hará cambiar nuestra actual idea de compra.
No hay duda de que el mejor envase ecológico es el que no existe.
El envase de vidrio es el más apropiado para envasar cualquier líquido, no transmite ninguna sustancia tóxica o no deseada al líquido que almacenemos en él, además, tiene una durabilidad extraordinaria.
Pero ¿para qué se necesita algo durable si solo se utiliza una vez y se tira a la basura?
Esta es la pregunta que se han hecho en Equivalenza, la empresa de perfumes y cosmética que están empezando a aplicar el sistema refill basado en el concepto de “Frascos reutilizables de perfumes”.
Es tan simple como que gracias a sus fuentes recargables de fragancias quieren contribuir a la reutilización de millones de frascos, reduciendo así la emisión de toneladas de residuos al año.
Los envases de vidrio, entre otros, también se han utilizado mucho para la leche. Sobre estos diferentes envases lácteos hemos encontrado un blog "verdequetequieroverde" en el que hacen una historia divertida y bastante didáctica analizando sus pros y sus contras.
Esta pequeña introducción sobre los envases nos muestra cómo podemos seguir aportando nuestro granito de arena en el cuidado del medio ambiente.
Ya sabemos que si cada uno contribuimos con un poco, entre todos conseguiremos mucho.