Una de las mayores amenazas de una “pertinaz” sequía es la relativa al campo y a los cultivos que en él se desarrollan. Aquí veremos cómo los regantes afrontan este grave problema.
Estamos padeciendo últimamente una ausencia de precipitaciones que nos hacen temer otra una pertinaz sequía. Aunque esta ausencia prolongada de lluvia no es nada nuevo ya que ocurre cada cierto tiempo y desde tiempos inmemoriales.
En efecto, en los años 40 y durante una década, los pantanos llegaron a estar al 15% de su capacidad. Comentar como anécdoa que la sequía fue tan duradera que se hicieron rogativas, y hasta sacaron a San Isidro Labrador. Este, que fue coronado como patrón del campo, era zahorí y pocero, haciéndose muy popular como taumaturgo. De ahí que cuando había una sequía, San Isidro Labrador era rezado para obrar el milagro de que sobreviniera la lluvia.
Cuando había una sequía, San Isidro Labrador era rezado para obrar el milagro de que sobreviniera la lluvia
En la década de los 80 volvió reapereció la sequía, empezaron a escasear las precipitaciones lo que motivó que, al año siguiente, la ésta fuera notoria. Incluso hubo gente que volvió a pedir que se sacara de procesión al santo del campo.
Pero como decíamos antes, la sequía en España se remonta a tiempos inmemoriales. Si quieres conocer cómo fue en la antigüedad el tema de las sequías, existe un libro que se llama “Las Aguas de España y Portugal” donde, cuentan entre otras cosas, las diferentes sequias ocurridas en España desde el siglo V a.C.
Ahora veamos qué es un sistema de riego. Es un mecanismo con el que un agricultor puede esparcir agua por un campo de cultivos de una manera uniforme para que todas las plantas que están sembradas reciban la cantidad de agua adecuada. Es decir, que el sistema de riego es independiente de si hay lluvia o no, pero siempre depende del agua que proviene de la lluvia y, por lo tanto, se debe aprovechar al máximo la eficacia del sistema de regadío para ahorrar la mayor cantidad de agua posible.
El método más artesanal es el de “surcos” que ha ido desapareciendo poco a poco, a medida que también han ido despareciendo los bueyes, que con la yunta hacían pequeños caminos –surcos- en la tierra. El campesino sembraba y regaba manualmente lo que ahora se ha ido relegando hasta dar paso a los sistemas de riego más tecnológicos.
Tanto la Administración como los regantes hacen un gran esfuerzo para economizar agua. Para ello se han esforzado en modernizar las infraestructuras para aumentar la eficacia del riego. Según datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente se ha conseguido un ahorro del 12% de agua gracias a estas actuaciones.
Se debe aprovechar al máximo la eficacia del sistema de regadío para ahorrar la mayor cantidad de agua posible
La superficie dedicada al regadío en España alcanza una cifra considerable: el 70 % del agua que se consume en nuestro país se dedica a regar, lo que nos indica la dependencia que tenemos a que no haya cambios climáticos que afecten a las precipitaciones pluviales.
Tenemos que hacer constancia de la posición de España a nivel mundial en cuanto a la optimización del riego. En cuanto a riego por goteo, España es el segundo país en números de hectáreas con riego por goteo, solo superado por Estados Unidos. Asimismo, ocupa el segundo lugar en porcentaje de esta tipología de riego en relación a otros sistemas de riego, por detrás de Israel. Por lo tanto, somos el primer país en la Unión Europea con 3,63 millones de hectáreas regadas (datos de 2015) lo que representa el 15% de la superficie agraria útil y que aporta sobre el 65 % de la producción final vegetal.
Una de las inversiones en infraestructuras para hacer más eficiente el riego y además, colaborar con el cuidado al medio ambiente es la tecnología de minihidráulicas, que aprovechan los saltos de agua para generar una energía limpia y a coste cero.
Dado que un 20% del agua que se utiliza para el riego es de origen subterráneo, también se realizan actuaciones para conseguir que la rehabilitación de estos acuíferos, que han sido catalogados como sobreexplotados, se realice con CO2, mucho más respetuoso con el medio ambiente que el tradicional ácido clorhídrico.
La tecnología también se ha incorporado a esos sistemas de regadío. La aplicación para teléfonos móviles de “Sistema de información Agroclimáticas para el regadío” (SIAR) puesta en marcha por la Administración permite optimizar el uso del agua en el regadío, promueve su sostenibilidad económica, social y medioambiental mediante el asesoramiento a los regantes, y les facilita información agroclimática relevante y estimaciones de riego a través de diversos medios.
Según datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente se ha conseguido un ahorro del 12% de agua gracias a estas actuaciones
Par ello, el SIAR (Servicio Integral de Asesoramiento al Regante) cuenta en la actualidad con 461 estaciones agrometeorológicas, de las que 361 son propiedad del Ministerio, situadas en zonas regables representativas en el territorio de doce comunidades autónomas, lo que supone una cobertura de más del 90% de la superficie de regadío española.
La aplicación de este sistema se ha puesto a disposición de toda la sociedad mediante una aplicación gratuita para teléfonos inteligentes, que se puede descargar desde la página Web del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimenación y Medio Ambiente, permitiendo al usuario configurar el sistema de riego, visualizar gráficas del estado del suelo y activar un aviso en su terminal cuando el cultivo varía su estado de riesgo hídrico.
Además, la aplicación permite tener acceso a la predicción meteorológica facilitada por AEMET para los 5 días siguientes, ofreciéndose datos de predicción sobre probabilidades de lluvia, temperatura mínima y máxima o velocidad del viento.
La APP (SIAR) puesta en marcha por la Administración permite optimizar el uso del agua en el regadío
Todo esto no es sino parte de toda una actuación de gran calado para evitar que los posibles cambios climáticos causen graves problemas a nuestro país. La dimensión social del campo es de suma importancia para el conjunto de la sociedad española y es importante dotarla de los recursos necesarios para que nos beneficiemos todos.
Fuentes consultadas:
eleconomista.es. (Un artículo de Francisoc Javier Borso)
mapama.gob.es - (Un artículo de Jaime Haddad)