La mitad de los españoles -un 53%- considera que su coche es imprescindible y el 60% no entienden las restricciones para acceder al centro. Yendo mas lejos, casi la mitad de los españoles no sabe cual es el distintivo medio ambiental que corresponde a su coche. incluso, un 11% no sabe que significado tiene.
Para conocer un poco más al respecto hacemos un pequeño viaje por algunas ciudades y capitales europeas.
Quizás conociendo los resultados que obtuvieron al atacar estos problemas de reducción de tráfico en las ciudades podremos mentalizarnos para lo que tiene que venir -o ya está viniendo- en España si exceptuamos Pontevedra ¿por qué la excluimos?
Sigue leyendo y sabrás por qué esta ciudad gallega es tan importante cuando tocamos la peatonalización, la reducción de emisiones al medio ambiente e, incluso, la seguridad vial.
En Copenhague, desde hace dos siglos, el vehículo tradicional para desplazarse por la ciudad es la bicicleta (su primer carril bici data de 1910) Solo cuando el coche se masificó en los años 50 tuvieron cierta permisividad, pero sus ciudadanos fueron los que pidieron que se volvieran a los buenos hábitos de antaño. Y así lo hicieron. La cantidad de bicis en Copenhague es mayor que el número de habitantes.
Un caso particular es el de Pontevedra. Una de las primeras capitales de provincia que cerraron el centro a los coches transformándola en zona peatonal. Como siempre pasa en estos casos, las voces se alzaron contra esa medida, aduciendo que iba a traer la ruina a los comerciantes y se iba a empobrecer el centro. El alcalde de la ciudad en julio 1999 dictó en tan solo dos meses un bando para peatonalizar 300.000 m2.
Ahora todos la defienden. Los reconocimientos no se hicieron esperar. Empezando por la Dirección General de Tráfico (se redujeron drásticamente las víctimas mortales a cero). Le concedieron el premio CERMI, el premio ONU-Hábitat 2014. El premio Lidership in Active Design: Excelente Award y el premio Euro China a la Movilidad inteligente 2015. también servirá como referente para la recuperación del barrio francés de Nueva Orleáns.
La segunda ciudad de Alemania, Hamburgo está implantando el programa Red Verde. Era totalmente necesario ya que la temperatura en la ciudad subió 9 grados centígrados en 60 años y subió el nivel del mar unos 20 cms. Para ello, unirá con rutas peatonales y carriles bicis todas sus áreas verdes, cementerios, instalaciones, parques y plazas. El objetivos es hacer una ciudad mejor para vivir, más sostenible para el medio ambiente y mas sano para sus habitantes.
La capital de Finlandia se verá libre de coches en un modelo de transporte on demand. Los ciudadanos podrán elegir que transporte público que quieren utilizar para llegar a su destino.
La capital de Noruega, Oslo, además de todas las acciones para evitar que siga aumentando el efecto de los gases invernadero con una prohibición para una zona en la que trabajan aproximadamente 90 mil personas, se desprenderá de todas las acciones que tenga en sociedades de combustibles fósiles. Un gesto muy simbólico porque es un país productor de petróleo.
La capital del Reino Unido, Londres quiere ser la ciudad más caminable del mundo. Quieren que en 2040, el 80% de los desplazamientos se hagan a pie en bici o en transporte público.
El programa Walking Action Plan, que presentó el alcalde Sadiq Khan, prevé invertir 2 400 millones de euros para acondicionar calles y, sobre todo, optimizar la red de transportes publico. por ejemplo, la red de metro data de mediados del siglo XVIII y se necesita mucha inversión para modernizarlo.
A estas ciudades europeas, se le sumarán otras de los demás continentes, que quieren afrontar el problema de la movilidad y de la contaminación de la mejor manera, donde todas las soluciones pasan por una máxima: restringir la circulación de coches por las zonas más céntricas de la ciudad y con mayor conglomeración de tráfico.
Fuentes consultadas:
El País, La Vanguardia, diario.es y marthadebaye