Las carreteras interurbanas son donde se producen la mayoría de los accidentes de tráfico. En el año 2021 se produjeron 1004 víctimas mortales, de ahí que siempre se busquen soluciones para que baje esta siniestralidad que, aunque se reduce año tras año, nunca es suficiente mientras exista una sola víctima en las carreteras.
De todos es sabido que una carretera en sí no tiene la culpa de ningún accidente, sino que son los conductores los que las convierten en peligrosas si no se respetan las normas de tráfico y no existe un comportamiento cívico.
Por suerte, las carreteras españolas están en una posición muy alta en el ranking europeo en cuanto al estado de conservación de carreteras. Concretamente, en el sexto puesto, justo por detrás de Holanda, Suiza, Austria y Portugal, pero por delante de los países nórdicos, Alemania y Francia que, por capacidad económica, deberían encontrarse en un nivel superior.
Por eso, no es que las carreteras españolas sean malas, sino que los conductores siguen teniendo despistes o comportamientos inadecuados. Y aunque muchas soluciones se basen en las últimas tecnologías dirigidas a los conductores, como son las Ayudas a la Conducción, para las carreteras también se desarrollan muchas tecnologías.
La tecnología 5g y el internet de las cosas, pueden proporcionar información muy valiosa para evitar accidentes. Por ejemplo, cuando varios sensores ubicados en determinados puntos de una carretera calculan que la cantidad de vehículos que circulan puede originar una mayor densidad de tráfico, envían esa información a los vehículos que se encuentren en un radio cercano para que disminuyan la velocidad o tomen una ruta alternativa.
Esas son medidas tecnológicas aplicadas a la seguridad en carreteras, pero hay otras medidas mucho más sencillas y baratas que también pueden incrementar la seguridad en las carreteras. Son sencillas porque se pueden adaptar rápidamente y sin cambiar prácticamente las infraestructuras.
Una de las más novedosas -tanto, que todavía están en experimentación- son los dientes de dragón, que son triángulos pintados en ambos lados del carril y que crean la sensación de estrechez por lo que el conductor tiende a reducir la velocidad.
Entre las medidas más efectivas con las que ya cuentan muchas carreteras, están los cruces inteligentes, que consiste en una señalización que organiza los cruces de tal manera que se reducen las posibles colisiones. Según un estudio de la Federal Highway de EE.UU., los muertos y heridos se reducen alrededor de un 40-50%.
El pavimento pintado se destaca también como un reductor de la siniestralidad en un 35%. Se trata de pintar el pavimento de un color muy llamativo, distinto a los normales que aumenta la atención del conductor.
Para evitar las colisiones frontales o laterales, una buna medida es aumentar el ancho de la mediana. Esta barrera crea, además, la idea en el conductor de que la carretera es más estrecha, vaya más despacio y lo que es mejor, no se lance a hacer adelantamientos peligrosos.
Otra medida son los dispositivos salvacunetas, que evitan los efectos negativos de una posible salida de la carretera. Si las ruedas del coche se salen de la vía, este no cae bruscamente a la cuneta, minimizando los accidentes graves.
Las guías sonoras son más conocidas, pero igual de eficaces. Están normalmente en las bandas blancas próximas al arcén y con su vibración llaman la atención al conductor de que se está desviando de su carril. Son muy eficaces en caso de somnolencia o despiste del conductor, evitándose una salida de la carretera o la invasión del carril contrario. La reducción de siniestros es de un 21%.
Todas estas soluciones se incluyen en un documento que recoge 31 medidas de bajo coste para crear un Sistema Seguro, reconocido por diversos organismos internacionales y reflejado en la Estrategia de Seguridad Vial 2021-2030 de España.
A este tipo de carreteras se les llama coloquialmente “carreteras que perdonan” porque efectivamente, perdonan los errores que por distracción o por cualquier otra causa permiten que el accidente no sea grave, que según hemos expuesto son vías con cunetas suaves, guardarraíles más seguros, rejillas de protección en cunetas, poste elevados y eliminación de cualquier objeto con el que el vehículo pueda impactar.
Fuentes consultadas:
Las mejores y peores carreteras europeas
revistadgt.es/carreteras-que-perdonan